SEMANA DE SÍNDROMES: SÍNDROME DE RAPUNZEL O TRICOFAGIA

 ¿NECESIDAD DE COMER PELO?

¡Bienvenidos de nuevo mentalistas! 

Seguro que todos vosotros conocéis o habéis oído hablar de Rapunzel, esa princesa con el cabello tan largo que estaba encerrada en una alta torre. Y os estaréis preguntando a que viene esta información sobre princesas y cuentos. Pues se debe a que existe un síndrome muy poco común y curioso que recibe su nombre. Os hablamos del síndrome de Rapunzel, también conocido como tricofagia. Este trastorno psicológico se caracteriza por la urgente necesidad de quien lo padece de comer pelo propio o ajeno. Esta acción puede conllevar graves problemas de salud, pues se pueden producir obstrucciones y/o perforaciones intestinales a causa de la acumulación de pelo en el tracto digestivo.

SÍNTOMAS:

• Náuseas.
• Vómitos.
• Pérdida de peso.
• Pérdida de apetito.
• Dolor abdominal.
• Sangrado intestinal.
• Dolor abdominal.

CAUSAS:

Las causas que provocan este síndrome son todavía desconocidas. Sin embargo, los pacientes que sufren esta afección suelen sufrir otros trastornos (como ansiedad, depresión o baja autoestima) lo que podría implicar una relación entre éstos y la tricofagia. Además, la tricofagia está relacionada con la tricotilomanía, un síndrome consistente en arrancarse el pelo. Más de un tercio de los afectados por tricotilomanía, después de arrancarse el cabello se lo comen.

TRATAMIENTO:

El tratamiento para esta afección es muy controvertido. No obstante, en todos los casos se recomienda acudir a un especialista para empezar un seguimiento psiquiátrico. Lo primero a lograr sería evitar la conducta compulsiva de comer pelo, para ello podríamos recurrir a la terapia conductual de privación de respuesta. También les podría ser útil aprender técnicas de relajación mediante el control de la respiración, de este modo, cuando sufran un episodio recurran a estas técnicas para lograr evitar la ansiedad y el deseo de ingerir pelo. 

Finalmente, en el caso de que se formase una bola de pelos en el tracto digestivo tendríamos que recurrir a un tratamiento más invasivo, llegando a tener que realizar una laparoscopía, una endoscopia o, en casos más severos, puede ser necesaria una cirugía abierta.

¿Alguna vez os habéis arrancado pelo?, ¿Habéis probado vuestro pelo sin querer?

Nos vemos en el próximo post...^^